¡¡UN MENSAJE URGENTE!!
HAY UN MENSAJE DE DIOS PARA TI:
No
tienes nada que perder, y sí mucho que ganar.
Un
alto en tu camino puede ser decisivo para tu destino eterno,
y
para vivir desde hoy mismo una vida plena.
Todos
hemos nacido y crecido en una sociedad supuestamente 'cristiana', y
creemos conocer el camino cristiano. Pero pregúntate esto: ¿has
experimentado el cristianismo que conoces como un verdadero camino de
vida? Una larga historia de infidelidades y fracasos nos ha dejado
como herencia un cristianismo enormemente distorsionado, mezclado con
elementos extraños al mensaje de Jesús, y oscurecido por la
conducta de las organizaciones religiosas que llevan su nombre...
El
cristianismo deformado que hemos conocido actúa como una vacuna: las
defensas que ha creado en nosotros nos impiden recibir el mensaje
genuino de Jesucristo, el camino que conduce a la Vida.
¡No
lo permitas! Y detente unos minutos en medio del ajetreo de la vida
para comprobar estas Buenas Noticias, ¡gracias a Dios todavía están
accesibles!.
DIOS
TE PROPONE ALGO INCREÍBLE
Algunos
han decidido creer que este universo existe por azar, sin ningún
propósito ni sentido. Pero Dios dice en la Biblia que él ha creado
el universo como un espacio de encuentro, ¡como el escenario para
tener una relación viva y amorosa contigo y conmigo!
Dios
te ha creado 'a su imagen y semejanza'. De la misma manera que un
guante es diseñado 'conforme a la imagen y semejanza' de la mano que
ha de contener, ¡tú
has sido creado como un recipiente para contener la Vida de Dios!,
¡para contener a Dios mismo!
Sí, mi querido/a amigo/a: Dios desea habitar dentro de ti y ser la
Vida de tu vida, porque te ha amado desde toda la eternidad.
Algunas
personas dicen que el ser humano es sólo materia. Otras filosofías
dicen que además del cuerpo, tenemos un alma. Pero Dios nos enseña
en la Biblia que nos diseñó en tres dimensiones: cuerpo, alma y
espíritu
“Entonces
el SEÑOR Dios
formó
al hombre del polvo de la tierra,
(cuerpo)
y
sopló en su nariz el aliento de vida
(espíritu);
y
fue el hombre un alma
viviente.
(Génesis
2,7)
“Todo
vuestro ser, espíritu, alma y cuerpo,
sea
guardado sin mancha”
(1Tesalonicenses 5,23)
El
alma
es nuestra personalidad, nuestro yo, que nos da conciencia de
nosotros mismos, y que incluye nuestra mente (pensamiento), nuestra
voluntad (decisión) y nuestras emociones (sentimientos).
El
cuerpo
es el órgano de nuestro ser que nos vincula al mundo material y por
medio del cual nos relacionamos con él; incluye los sentido físicos.
El
espíritu
es el lugar más íntimo de nuestro ser; es el órgano que nos
vincula con Dios, el cual es Espíritu. Incluye la conciencia y las
facultades de percibir a Dios y entrar en comunión con Él. Nuestro
espíritu está diseñado 'conforme a la imagen y semejanza' de Dios
para poder contenerle; ninguna otra cosa puede llenar el espíritu
humano, por eso ninguna otra cosa puede satisfacernos plenamente.
¡Estamos hechos para lo eterno!
¡Esta
es la primera buena noticia: Dios desea entrar en tu espíritu para
hacerte partícipe de su Vida plena, abundante y eterna!. Dios te
invita a 'que eches mano de la Vida Eterna'. ¡Así de sublime y de
sencillo!
EL
FRACASO DEL SER HUMANO
Pero
no sería honesto ocultarte que hay una mala noticia: los seres
humanos venimos rechazando desde el principio esta invitación. No
deseamos recibir a Dios como nuestra Vida y vivir por medio de Él.
Preferimos vivir 'por nosotros mismos', por nuestros propios
recursos, independientes y al margen de Dios. Esto es lo que la
Biblia llama 'Pecado'. ¿Puedes reconocerlo en ti? Todos somos parte
de esta Humanidad rebelde a Dios.
El
Pecado no sólo frustra el deseo de Dios respecto a nosotros, también
es nuestro fracaso, que se resume en una palabra: muerte. Rechazar la
Vida (Dios) conlleva inevitablemente la muerte:
--
muere nuestro
espíritu,
quedando inhabilitados para percibir a Dios y alcanzar nuestro
destino;
--
luego esa muerte se va extendiendo a nuestra
alma:
miedo, vacío insaciable, sinsentido, depresión... lo cual acaba
manifestándose también en nuestro
propio cuerpo
como enfermedades.., hasta que se consuma con la fuerte física;
--
pero la muerte también se extiende por nuestras
relaciones,
introduciéndose la mentira, las desigualdades, las injusticias, las
violencias, la codicia, las estructuras económicas y sociales que
matan a millones de seres humanos y destruyen la
naturaleza...
Así
diagnostica la Biblia la
raíz de todos los males:
la separación de Dios producida por el Pecado, siendo su último y
más amargo fruto la muerte, la frustración eterna del glorioso
destino humano. A eso se refiere la Biblia con el término
'infierno'.
A
lo largo de la historia, el ser humano ha buscado por todos los
medios escapar de esta situación, pero nuestros intentos son en
vano, como se ve en cualquier telediario
-
la educación no nos está salvando
-
la ética y la declaración de los derechos humanos no nos están
salvando
-
las revoluciones sociales y políticas no nos están salvando
-
las buenas obras y la religión, es decir, lo que 'nosotros'
pretendemos hacer para ganarnos el favor de Dios, tampoco nos están
salvando... ¡ninguna de estas cosas puede salvarnos del Pecado y sus
destructivas consecuencias!
Incluso
cuando queremos hacer el bien, nos acaba saliendo el mal. El Pecado
ha envenenado nuestra naturaleza humana, es un poder que habita en
nosotros y que nos obliga a desobedecer a Dios, a vivir en rebeldía
a Dios, arrastrando a la creación entera a la destrucción. ¿Quién
nos librará de esta situación de muerte?.
LA
SOLUCIÓN DE DIOS
Querido/a
amigo/a, ¡Dios no nos ha abandonado!, sino que nos ha provisto el
Camino de Salvación. Escucha atentamente esta noticia maravillosa:
“Porque
de tal manera amó Dios al mundo, que dio
a su Hijo unigénito,
para
que todo aquel que cree en El, no se pierda,
sino
tenga vida eterna.
Porque
Dios no envió a su Hijo al mundo para juzgar al mundo,
sino
para que el mundo sea salvo por El”.
(Juan
3,16-17)
“Palabra
fiel y digna de ser aceptada por todos:
Cristo
Jesús vino al mundo para salvar a los pecadores”.
(1Timoteo 1,15)
¡¡Este
es el corazón del mensaje cristiano, las Buenas Noticias:
JESUCRISTO,
el
Salvador enviado por Dios para librar a la Humanidad de la raíz de
todos sus problemas y darle Vida Eterna!!
Él
es el Hijo del Dios viviente, Dios mismo, que se hizo un ser humano
como nosotros. No fue sólo un buen hombre, ni siquiera un gran
hombre: Él es el Dios-hombre
“Porque
en Él habita corporalmente
toda la plenitud de la
Deidad”
(Colosenses
2,9).
Jesucristo,
Dios y hombre verdadero, cargó voluntariamente con todos nosotros
para sufrir, en nuestro lugar, nuestro destino de muerte;
cuando él subió a la cruz y murió, estaba sufriendo en nuestro
lugar las consecuencias de todos nuestros pecados. Él no sólo murió
físicamente, ¡Él, como hombre, gustó voluntariamente por nosotros
el infierno de la separación de Dios¡ ¡¡Cristo
te amó tanto que murió por ti, en lugar tuyo,
para
que tú no tengas que sufrir la frustración eterna apartado de
Dios!!.
Él
murió verdaderamente. Y fue sepultado. Pero como era Dios, la muerte
no pudo retenerle, 'el
Padre le levantó de entre los muertos',
le resucitó corporalmente y le
convirtió en 'espíritu
que da Vida':
¡¡Jesucristo tiene el poder de darte Vida Eterna!! ¡¡Él es la
Vida Eterna!!:
“Os
anunciamos la Vida Eterna,
la
cual estaba con el Padre,
y
se nos manifestó”
(1Juan 1,2)
|
“El
que tiene al Hijo, tiene la vida;
el
que no tiene al Hijo de Dios
no
tiene la vida”
(1Juan 5,12)
|
¡¡AHORA
MISMO PUEDES ECHAR MANO DE LA VIDA ETERNA!!.
¡¡LA
DECISIÓN ES TUYA!!
¿Cómo
se echa mano de Jesucristo, la Vida Eterna?
“Porque
de tal manera amó Dios al mundo, que dio
a su Hijo unigénito,
para
que
todo aquel que cree en El,
no se pierda, mas tenga vida eterna. (Juan
3,16)
“Si
confiesas
con tu boca a Jesús como Señor,
y
crees en tu corazón que Dios le levantó de los muertos,
serás
salvo”.
(Romanos
10,9)
¡Dios
no nos lo puede poner más sencillo! No nos pide hacer grandes
sacrificios, ni cosas espectaculares o difíciles: sólo 'creer
de corazón'
y 'confesar
con la boca'
que Jesús es tu Salvador y tu Señor. En el momento que lo hagas, tu
espíritu, que estaba muerto, será vivificado, y la Vida Eterna será
sembrada dentro de ti. ¡Serás un/a hijo/a de Dios por siempre!.
¡Atención!
La Biblia no dice jamás que oremos a los santos, o a la madre de
Jesús, nos dice que debemos concentrarnos en Jesús y mirarle sólo
a Él
“En
ningún otro hay salvación;
porque
no hay otro Nombre
bajo el cielo, dado a los hombres,
en
que podamos ser salvos.
(Hechos 4,12)
Escucha,
pues, lo que te está diciendo Jesús en estos mismos momentos:
“Yo
soy la resurrección y la vida;
el que cree en Mí, aunque esté muerto, vivirá.
Y
todo aquel que vive y cree en Mí, no morirá eternamente. ¿Crees tú
esto?”
(Juan
11,25-26)
¡¡No
esperes más!! ¡Deja atrás tu vieja vida separada de Dios, haz
ahora mismo de corazón una oración sencilla (por ejemplo: 'Jesús,
tú eres mi Salvador y mi Señor'), y empieza una nueva vida!
“El
que crea
y
sea bautizado,
será salvo”. (Mc
16,16a)
Bautizarse
es 'sumergirse' en agua,
como
signo
externo de tu fe,
de
tu identificación personal con Cristo
crucificado
y resucitado.
Entra
lo viejo en el agua (morir con Cristo)
y
sale una nueva criatura (resucitar con Cristo).
Tal
vez te bautizaron de bebé, pero tal como fue enseñado y practicado
por Jesús y sus discípulos, la fe propia
y personal
era requisito para recibir el bautismo
“Aquí
hay agua; ¿qué impide que yo sea bautizado?
Felipe
dijo: Si
crees
de todo corazón, bien puedes”.
(Hechos
8,37)
Según
la Biblia, cualquier cristiano verdadero puede bautizarte, busca uno
¡y confiesa ante el mundo que eres una nueva criatura bautizándote
en el Nombre de Jesús!
LA
NUEVA VIDA
Si
te has decidido, debes conocer algunas cosas importantes que te han
ocurrido:
“Porque
(Dios) a los que antes
conoció, también los predestinó
para
que fuesen hechos conformes a la imagen de Su Hijo,
para
que El sea el Primogénito entre muchos hermanos”.
(Romanos 8,29)
CREYENTE
RENACIDO
Y
EN TRANSFORMACIÓN
¡¡Aquí
empieza, justamente, el cristianismo auténtico!!
2. Tu espíritu ha sido regenerado, habitado por el Espíritu de Jesucristo, y ahora es tu privilegio poder comunicarte con Él. Esto lo puedes hacer por medio de la oración y la lectura de la Biblia. Cuéntale tus problemas, pídele por tus necesidades, dale gracias, cántale, y busca sus 'palabras de vida' en las Escrituras, Él te irá abriendo sus tesoros. (Te recomendamos que empieces por el Nuevo Testamento, especialmente el evangelio de Juan).
3. La Vida eterna es una vida compartida. Al creer en Jesús te incorporas a la Familia de Dios, te conviertes en un miembro de su Cuerpo, que no es una organización religiosa, sino un organismo vivo: la comunión viva de todos lo que tienen el Espíritu de Cristo.
“Así
nosotros, siendo muchos, somos un solo Cuerpo en
Cristo
y
miembros cada uno en particular, los unos de los otros”
(Romanos 12,5)
Si
Cristo está en ti, sentirás el impulso de unirte con todos aquellos
que también son de Cristo: ¡tus hermanos! Experimentarás un amor y
un gozo especiales con ellos, recibiendo y dando ayuda para que
Cristo se vaya formando en nosotros. Cristo quiere que sus discípulos
le sigan juntos, ayudándose a crecer, amándose unos a otros como Él
nos amó, y siendo una expresión viva de Cristo en cada localidad
para que el mundo crea y se salve. Pídele al Señor que te guíe
para encontrar a tus hermanos en tu localidad. ¡Nos necesitamos unos
a otros!.
P.F. Obed
gracias por este buen material es bueno estar informado gracias
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