Dios amor y el pecado

DIOS AMOR Y EL PECADO

Dios es amor, pero también aborrece el pecado. Porque Dios es amor, pero también es Luz sin mezcla de tiniebla ninguna, también es Santo y puro, totalmente separado del mal y del pecado, también ama la justicia y aborrece la injusticia, la mentira, la soberbia, la impiedad, la idolatría, el robo, el homicidio, la inmoralidad sexual, la codicia... 

¿Puede el Amor odiar y aborrecer? Por supuesto. El Amor odia y aborrece todo lo que daña y destruye y mata al objeto de su amor. Dios ama su Creación, ama a cada criatura, ¡por eso odia aquello que daña, destruye y mata a sus criatura: el Pecado!. NO HAY AMOR NINGUNO EN JUSTIFICAR, LEGITIMAR, O APOYAR LO QUE TE MATA.

Por eso Jesús no condenó a la mujer sorprendida en adulterio, pero la despidió diciendo: "vete y no peques más" (Jn 8:11); o a aquel otro que sanó: "no peques más, para que no te ocurra algo peor" (Jn 5:14). 

"Porque la paga del pecado es muerte" (Rm 6:23). "Vuestras iniquidades son las que hacen separación entre vosotros y vuestro Dios. Vuestros pecados han hecho que su rostro se oculte de vosotros para no escuchar" (Isías 59:2). El pecado levanta una barrera de separación entre el hombre y el Dios santo y justo, que es la Fuente de la Vida. ¡Por eso el pecado lleva a la muerte!. LA MUERTE ES SEPARACIÓN DE DIOS, AISLAMIENTO ABSOLUTO. No es sólo la muerte física (que nos separa y aisla del mundo de los vivos), es una existencia eterna separados de Aquel que es la Vida, bajo el juicio divino contra el pecado con el que nos identificamos: "Mientras vosotros hacíais todo esto, yo permanecí en silencio, y pensasteis que no me importaba. Pero ahora os voy a reprender, enumeraré todas las acusaciones que tengo contra vosotros. Arrepentíos todos los que os olvidáis de mí, o os despedazaré y nadie os ayudará" (Salmo 50:21-22).

Por eso, ¡precisamente por que Dios es amor es que envió a su Hijo para librarnos de nuestros pecados y del castigo que merecemos por ellos!. ¡Precisamente porque Dios es amor es que contiende con el ser humano para que se arrepienta de sus pecados, para que abandones sus caminos de muerte, y crea en Aquel que vino a traer vida en abundancia: Jesús: "porque a menos que creáis que Yo Soy (el Hijo de Dios), en vuestros pecados moriréis" (Jn 8:24).

Estas son las Buenas Noticias: que en Cristo hay perdón y liberación del pecado que te mata. 

¿Qué harás ahora?

P.F. Obed