22 de Diciembre: la diosa Fortuna nos visita

Estos días multitudes andan tras la diosa fortuna, depositando en ella su esperanza para una vida mejor. Los cristianos no deberían dejarse arrastrar por esta práctica pagana, esta devoción a Mammón (dios de la riqueza), al enriquecimiento rápido y sin esfuerzo, justificado a menudo con nobles intenciones ('sólo para salir de los apuros...'; 'ayudaría a mucha gente...'). No nos engañemos mezclando al Dios vivo con falsos dioses, o peor, tratando de usar al Dios vivo para pretender beneficios de dioses falsos ('yo confío en que Dios me ayudará haciendo que me toque la lotería...'.

O confiamos en el Único, nuestro Padre amoroso, fiel y providente con las necesidades de sus hijos, o confiamos en la suerte, en supersticiones... ¡falsos dioses!. "Ninguno puede servir a dos señores; porque o aborrecerá al uno y amará al otro, o estimará al uno y menospreciará al otro. No podéis servir a Dios y a Mammón (las riquezas)" (Mateo 6:24).

Hijitos, guardaos de los ídolos (1Juan 5:21).

¡¡Es día de pensar en riquezas, Cristianos!!: las SUPERABUNDANTES RIQUEZAS de la gracia de Dios, por su bondad hacia nosotros en Cristo Jesús (Ef 2:7); las RIQUEZAS de la gloria: Cristo en vosotros, la esperanza de gloria (Col 1:27); las inescrutables RIQUEZAS de Cristo (Ef 3:8), en el cual están escondidos todos los tesoros de la sabiduría y del conocimiento (Col 2:3).

¡¡"Mi Dios, pues, suplirá toda necesidad vuestra, conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús"!! (Flp 4:19).

P.F. Obed

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